Al no encontrar la ayuda que buscaba, decidí enfocar mi formación académica a resolver mis propios problemas de salud.
Para mi sorpresa estos problemas, eran funcionales, ¿qué quiere decir?…
Básicamente, no me matarían a corto plazo pero si anularían por completo mi calidad de vida, dejándome encerrada en casa sin poder trabajar ni vivir (Para mí esto era muerte en vida, imagino que para ti también).
Que un problema funcional se resuelva, implica encontrar las causas que lo provocan, para poder darles solución y que el organismo recupere su función.
Digamos que mi plan de curarme se vio truncado.
Conforme avanzaba en la universidad, me di cuenta de que la formación sanitaria actual no contempla abordar un problema de raíz, sino más bien parchear el síntoma.
En otras palabras, conseguí una base de anatomía, fisiología y farmacología fantástica, pero nada más.
‘La decepción no mata, enseña’
No soy capaz de aceptar que un problema no tiene solución.
Me habían enseñado que ser así, era un defecto, que a veces no se puede hacer nada y solo me provocaría una ansiedad innecesaria.
Pero ¿sabes qué es la ansiedad?
Resulta que el cerebro humano está constantemente evaluando potenciales peligros para tu vida. En un contexto evolutivo la ansiedad nos ayuda a sobrevivir y nos activa para resolver problemas.
A veces esta ansiedad se pasa de rosca y empieza a buscar soluciones a problemas hipotéticos que al no existir todavía, no podemos darles solución.
La ansiedad es parte de nosotros, no podemos eliminarla, pero si gestionarla adecuadamente (esto es lo que más me ha costado aprender).
Finalmente, el defecto se convirtió en virtud, mi naturaleza curiosa, rebelde y autodidacta, activó mi ‘modo supervivencia’ y pasé al plan B, estudiar por mi cuenta.
Ahí sí encontré las respuestas que buscaba.
Después del primer problema que me introdujo en el mundo del abordaje integrativo, ocurrieron una serie de infortunios en mi salud. Por esto mis pacientes me llaman de forma cariñosa ‘El libro gordo de petete’.
Me han surgido las mismas dificultades que a ti y he tenido tiempo de sobra para desarrollar herramientas para esos problemas que surgen cuando tienes ojo seco, problemas digestivos, hormonales, autoinmunidad o SQM.
También he aprendido a adaptarlas a cada paciente, porque trabajo con personas que tienen un contexto, no con robots automatizables.
Puedes seguir conociéndome en estas secciones y también dar el primer paso para recuperar tu salud.
¿Empezamos?
Quiero mejorar mi salud.